Beneficios de las puertas automáticas en las farmacias

Las puertas automáticas son productos muy bien aceptados por la sociedad. En la mayoría de países es un elemento que está instalado en multitud de edificios y locales de sectores como el sanitario, horeca, comercio, oficinas o aeropuertos.

Si bien es cierto que una gran parte de hospitales y clínicas ya cuenta con accesos inteligentes en las entradas y salidas, muchas farmacias todavía tienen puertas manuales. Los establecimientos farmacéuticos que han sido renovados en los últimos años han optado por incluir una puerta automática para mejorar el acceso y tránsito de clientes, proveedores y empleados. Pero, ¿qué beneficios y ventajas tiene?

• Facilita el acceso de personas. En especial, el de los ancianos o personas de la tercera edad que, por lo general, suelen tener mayores dificultades a la hora de caminar o van en silla de ruedas. Además, otro colectivo que se beneficia es el de las personas con niños que van en carrito o cochecito. También podemos incluir a aquellas mujeres u hombres que caminan con muletas o que tienen algún tipo de discapacidad.
• Mejora la eficiencia energética. Los sensores de la puerta automática accionan el producto para abrirlo o cerrarlo si detectan presencia o movimiento de alguna persona. Esto evita que una puerta quede abierta por un descuido y cambie la temperatura del local cuando está encendida la calefacción o el aire acondicionado.
• Ayuda a prevenir contagios. La pandemia del coronavirus COVID-19 ha hecho que las personas extremen su higiene con lavado de manos, mascarilla, etc. Para acceder a una farmacia que dispone de puerta automática no se debe entrar en contacto con el cristal o una manilla, por lo que se evita que cualquier virus quede impregnado en las manos.

Además, los repartidores de mercancía agradecen este tipo de accesos automáticos porque, al venir cargados con material, la puerta del local se abre al instante sin que el transportista pierda su preciado tiempo.