Sostenibilidad

¿Es posible que los negocios comerciales en España puedan contar con puertas automáticas el 1 de octubre?

José F. Medina. CEO de Manusa

El 30 de septiembre termina el plazo para que los edificios administrativos, comerciales y de pública concurrencia cuenten con el cierre de forma automática de puertas en edificios y locales con acceso desde la calle. Ante ello, se abren los siguientes interrogantes: ¿contarán todos los negocios comerciales en España con puertas automáticas el 1 de octubre? ¿Serán capaces de afrontar esta inversión? ¿Podrá dar respuesta el sector de los fabricantes e instaladores de puertas automáticas a la creciente demanda?

Lo cierto es que el Real Decreto-ley 14/2022 acelera un proceso que en los comercios, bares y restaurantes y edificios de afluencia pública en general ya se estaba produciendo. En Manusa, como empresa pionera en España con más de 50 años fabricando e instalando puertas automáticas y con dos centros de producción en el territorio, somos testigos de cómo se está desarrollando esta actividad y cómo ha evolucionado la necesidad de esta automatización en el mercado. La sustitución de la puerta tradicional por una automática se activó de forma sensible con la irrupción de la Covid-19. Muchos locales optaron ya entonces por instalar puertas automáticas porque evitan el contacto y, por lo tanto, minimizan, además de la suciedad, posibles contagios.

Ahora, desde el Gobierno, se ha señalado la instalación de puertas automáticas como necesaria para el ahorro energético, junto con otras medidas. Esta ya era una medida contemplada en el vigente Reglamento para Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE) y que ya están adoptando también otros países de la Unión Europea.

Aparte de significar un gran ahorro, en muchos bares y restaurantes la instalación de puertas automáticas se ha presentado como una excelente solución para facilitar el trabajo al personal, ya que no debe empujar ninguna puerta cuando lleva las manos ocupadas. Por otro lado, los sensores de las puertas detectan la presencia y el movimiento en cuanto alguien se acerca para abrirse rápidamente evitando posibles accidentes. Nuestras puertas, las más rápidas del mercado, reaccionan y se abren a una velocidad de hasta 1 metro por segundo, invitando así a pasar de forma amable y cómoda, detectando la aproximación de la persona con anticipación y evitando la sensación de “local cerrado” o “barrera”. Esto es algo muy importante para un negocio o recinto de uso público en el que se producen accesos o salidas de público en general. Pero, además, nuestras puertas automáticas también evitan los atrapamientos, ya que cuentan con sensores capaces de detectar si hay una persona en la zona de paso, permaneciendo abiertas y evitando que la persona sea golpeada.

A su vez, las puertas automáticas permiten que el negocio sea accesible para personas con movilidad reducida o aquellas personas que empujan un carrito de bebé o van cargadas con bolsas de la compra. Es así como la puerta automática asegura un acceso fluido y sin barreras. La incorporación de tecnología IoT (Internet de las cosas) permite la gestión remota, de modo que, ante cualquier incidencia, es posible contactar desde el móvil con el servicio técnico. En definitiva, las puertas automáticas aportan seguridad, estética y funcionalidad.

Y con ello, se abre la siguiente pregunta: ¿podemos responder a esta gran demanda?

En nuestro caso, somos líderes en el territorio nacional y servimos a 90 países distintos. Contamos con dos fábricas donde trabajan más de un centenar de personas y también con centros de almacenaje y producción a medida distribuidos por toda la geografía nacional. A lo largo del año, nos encontramos a menudo con momentos de mayor número de pedidos en algunos de los mercados en los que tenemos presencia. Por ello, tenemos plena capacidad de adaptación y respuesta a momentos de aumento de demanda. Pero con la salida de este nuevo Real Decreto-ley de ahorro energético, es importante remarcar que, además de responder a la urgencia, los establecimientos deben contar con la mejor alternativa y más inteligente para asegurar ese cumplimiento normativo y, a su vez, mejorar el espacio físico de su negocio o actividad. Pese a la urgencia del momento, es necesario tener garantizada una mejora en la accesibilidad de su local. A la hora de decidirse por una solución personalizada de puerta automática, es muy importante tener en cuenta que incorporamos un elemento principal en nuestro local, además de por las ventajas descritas, porque por él pasan personas: clientes, usuarios, invitados o colaboradores que, en definitiva, son lo más importante y deben tener la mejor experiencia. Por ello, la puerta automática tiene que ofrecer la máxima calidad y fiabilidad y el fabricante debe contar con un óptimo servicio técnico, cualificado y con garantías para mantener esta instalación en correcto funcionamiento durante años.

Tratándose de Real Decreto-ley aprobado en agosto, es muy comprensible que a muchos establecimientos les pueda parecer difícil cumplir con el plazo establecido. Es por ello por lo que, para ayudarles, en Manusa ofrecemos un documento acreditativo que informa que el establecimiento ha iniciado el proceso para la instalación de una puerta automática a pesar de no haberse podido completar antes del 30 de septiembre. Entendemos que el espíritu de las diferentes administraciones es el de reconocer positivamente la voluntad de adecuación de los locales y que esta acreditación conforme han iniciado dicha adecuación, responderá a ello.